ASÍ ESCAPÓ CORINA MACHADO DE VENEZUELA

*Diario La Selva

En la historia reciente de Venezuela, pocos episodios han captado la atención y la admiración internacional como la extracción de María Corina Machado del territorio venezolano en medio de una situación de alta tensión y riesgo. La líder opositora, siempre recluida en lugares clandestinos para evitar ser capturada o acosada por el régimen de Nicolás Maduro —una lucha que viene librando desde los tiempos de Hugo Chávez— se convirtió en el centro de una operación que ha marcado un antes y un después en la defensa de los derechos humanos y la libertad en la región.

Machado siempre se mantuvo en suelo venezolano, escondida en distintos lugares no revelados para preservar su seguridad. Su lucha constante contra la dictadura y su firme postura democrática la hicieron merecedora del Premio Nobel de la Paz este año. Sin embargo, la sistemática ofensiva de las izquierdas y los grupos afines al socialismo en el mundo intentaron desprestigiar su figura e incluso evitar el reconocimiento que finalmente recibió.

Cuando se aceleró la noticia de que finalmente recibiría el Nobel en Oslo, Noruega, se puso en marcha una operación de extracción denominada Dinamita de Oro, diseñada para sacar a Machado de Venezuela y garantizar que pudiera llegar al acto de premiación. Aunque no llegó a tiempo para recibir el galardón en persona —su hija lo hizo en su lugar— la operación fue un éxito absoluto.

Bryan Stern, director de la Grey Bull Rescue Foundation, organización especializada en rescates de alto riesgo, fue el encargado de liderar la operación. En una entrevista concedida a CBS News, relató detalles de uno de los rescates más peligrosos que ha comandado.

«Fue peligroso. Fue aterrador. Las condiciones del mar eran ideales para nosotros, pero ciertamente no es el agua en la que te gustaría estar», explicó Stern, señalando que las grandes olas interferían con las ondas de los radares.

La extracción fue planeada apenas cuatro días antes de su ejecución, en un escenario donde cada minuto contaba y donde la más mínima filtración podía significar el fracaso de la operación e incluso la captura de Machado. «Fue la misión de mayor amenaza y alto riesgo que hemos hecho nunca», aseguró.

Machado vivió en la clandestinidad durante semanas previas al operativo, y Stern destacó que, pese a la oscuridad y al fuerte oleaje, la líder venezolana no se amilanó en ningún momento. «No mostró temor. Fue valiente», relató. «Caminó más de 28 horas para encontrarse con nosotros y nuestro equipo en un lugar que no podemos revelar por razones obvias.»

La travesía incluyó 13 horas de navegación por mar abierto hasta un sitio seguro, lejos de la mirada del régimen. Stern destacó la fortaleza de Machado frente a condiciones adversas que habrían desalentado a muchas otras personas. «Hubo olas muy difíciles. Una mujer de mucho coraje que es mi héroe», concluyó el veterano de las fuerzas especiales estadounidenses.

Aunque Machado no pudo estar presente en la ceremonia de Oslo, su extracción y el hecho de que su hija recibiera el Nobel en su nombre se convirtieron en símbolos de resistencia. Para muchos, María Corina Machado es hoy un emblema de coraje, convicción y rechazo a cualquier forma de dictadura. Su premio Nobel y la audacia de su rescate han dejado sin argumentos a sectores que intentaron minimizar su lucha.

Hoy, Machado se posiciona no solo como una figura clave en la historia venezolana, sino también como una líder mundial cuya historia de resistencia y valentía marcará un precedente en la defensa de las libertades democráticas.

✍️I.R

Fotos: Redes sociales